Las fuentes de energía renovable y los convencionales necesitan tecnología que transforme algunos recursos naturales en Electricidad y electricidad.
La vida económica de esta tecnología es un aspecto muy importante para evaluar el costo-beneficio a corto y largo plazo y para determinar si invertir en una fuente es más rentable que en otra.
Tanto a nivel industrial como doméstico, es útil conocer la vida útil de cada uno de ellos, así como el nivel de contaminación que genera:
Módulo solar fotovoltaico: aprox.20 a 30 años, dependiendo del tipo de módulo que utilicen los paneles.
Turbina o turbina eólica terrestre: Esta tecnología dura unos 20 años con poco mantenimiento.
Turbina eólica marina o turbina eólica: Estas turbinas son más fuertes que las terrestres porque las condiciones climáticas en el mar son difíciles y tienen que ser más resistentes para alcanzar una vida útil de 20 años.
central eléctrica de carbón: Dependiendo de la edad de la planta entre 25 y 40 años, ya que las más nuevas tienen una mayor esperanza de vida que las antiguas
Planta de energía nuclear o nuclear: Las centrales nucleares tienen una vida útil de 40 años, pero pueden extenderse algunos años con mantenimiento.
Centrales hidroeléctricas: Este tipo de plantas tiene una vida útil muy variable de 30, 60, 45 y 150 años. Depende del tipo de presa y construcción, tamaño y otras variables ambientales como sedimentación y erosión, que pueden reducir su vida útil a más de la mitad.
Estos números son calculados por fabricantes y fabricantes. Son aproximados, teniendo en cuenta los materiales, el desgaste de los componentes por uso y otras variables. Al definir una vida económica, esto se refiere a la capacidad de producir energía a un costo económico aceptable.
La vida útil de la tecnología no siempre se corresponde con la vida útil económica de la misma, porque en ocasiones no coincide. La tecnología o las construcciones se mantienen, pero no son económicamente viables.