Durante estos días hemos visto en las noticias los incendios provocados por manos humanas en Galicia. La mayoría de los incendios fueron deliberados.
Sabemos que los incendios forestales tienen consecuencias negativas para los bosques y las personas, los recursos y la economía. Además, las emisiones de CO2 emitidas durante el incendio, contribuir a incrementar el efecto invernadero y por tanto al cambio climático. Sin embargo, ¿sabemos qué tipos de incendios existen y qué nombres están involucrados?
Cuando vemos mensajes de incendios forestales, es normal ver vocabulario incorrecto o mal utilizado. Por ejemplo, para nombrar al presunto autor del incendio provocado, la palabra pirómano se llama. Un pirómano es una persona que padece una enfermedad que consiste en generar fuego y observar las consecuencias. Por lo general, estas personas son tratadas por un médico.
La persona que prende fuego a un bosque con la intención, con fines lucrativos o simplemente para el mal, Es un pirómano. Es decir, las personas detenidas por los incendios de Galicia son pirómanos, no pirómanos.
Si nos referimos al hecho de que el fuego es humano, no natural, es mejor decir que el fuego estaba previsto. Cuando decimos la palabra provocada cuando hablamos de fuego a través de las personas, nos estamos refiriendo a otra cosa. Por ejemplo, un incendio fue causado por una chispa, por la quema de rastrojos, por un rayo … Entonces, si es causado por humanos, es mejor decir que es intencional.
Por otro lado, un fuego controlado Es el que ha quedado aislado y cuyo avance y propagación se ha detenido, y un fuego estabilizado Es el que se desarrolla dentro de las líneas de control establecidas.
También es común utilizar el término «orografía del terreno». Esto es superfluo ya que la palabra orografía es “el conjunto de montañas de una región, región o país” y por lo tanto la idea de país ya está incluida en ella.
Con estas palabras podemos entender mejor el problema del fuego y evitar posibles errores mientras escuchamos las noticias.