Los ecobarómetros son herramientas perfectas para determinar el nivel de conciencia del ciudadano ante problemas ambientales de diversa índole y otros problemas. Hay muchos temas que son motivo de preocupación para las personas, otros que no están tan preocupados y otros que ni siquiera se les pasan por la cabeza.
En este caso, la protección del medio ambiente ocupa el tercer lugar en la lista de preocupaciones españolas a largo plazo, después del paro y las pensiones. ¿Qué temas preocupan más al ciudadano español?
El barómetro ecológico
El examen de los ecobarómetros se realiza a través de pequeñas encuestas ciudadanas. Se te presentará un tema que tratará el cuestionario, o te enfrentarás a una situación y luego harás preguntas específicas sobre el tema. En este caso, este proyecto fue elaborado a nivel nacional en julio de 2016 por la Fundación Endesa y la Fundación Sociedad y Educación Europea en dos vertientes: una enfocada a jóvenes de entre 18 y 35 años y otra a un público amplio de 18 a 35 años. y 75 años.
El proyecto se desarrolló a través de entrevistas con alrededor de 1.000 personas, con los más jóvenes en Internet y con el público en general por teléfono. De estos cuestionarios se extrae una gran cantidad de información importante para desarrollar políticas gubernamentales que satisfagan las necesidades y expectativas de los ciudadanos. Por ejemplo, algunas de estas encuestas muestran que el 54 por ciento de los estudiantes, hasta los 16 años de edad, consideran que el aprendizaje escolar es inadecuado en términos de medio ambiente y energía.
Resultados y conciencia ambiental
Juan Carlos Rodríguez es uno de los autores del proyecto realizado e investigador del Centro de Analistas Sociopolíticos. En rueda de prensa señaló que los resultados muestran que los jóvenes sacan más del aprendizaje que obtienen de la familia, amigos o incluso a través de los medios de comunicación de lo que obtienen en las escuelas y le dan una mayor importancia.
En materia de concienciación medioambiental, se puede decir que los españoles son conscientes de los peligros que suponen los productos químicos utilizados en la agricultura. Además, son conscientes de los efectos negativos que provocamos como: B. la contaminación de los ríos o el aumento de las temperaturas globales en el planeta.
Contaminación y patrimonio para el futuro
Una vez analizados los más recientes, se centran en el público en general. Aquí, la preocupación por el medio ambiente se centra más en la contaminación y el legado dejado a las generaciones futuras que en las generaciones inmediatas, como los hijos y nietos. También se preocupan por la protección de la naturaleza, la necesidad de preservarla y darle un beneficio para que no se destruya.
Los datos obtenidos también contrastan con la limitada capacidad que debe tener la sociedad española para afrontar los costes de determinados problemas medioambientales. Es decir, los costes ocasionados por fenómenos meteorológicos, la tala de árboles, incendios, etc.
Además, los resultados de varios análisis han demostrado que, gracias a las campañas de ahorro de luz y eficiencia energética, se ha incrementado el uso de bombillas de bajo consumo y la adopción de hábitos de reciclaje. A pesar de todo esto, persiste el sentimiento de falta de educación y formación. Son los educadores ambientales los que necesitan trabajar en la formación y sensibilización de ciudadanos que sean capaces de maniobrar cada día persiguiendo y tomando medidas respetuosas con el medio ambiente.
Dado que los conocimientos que los diferentes sectores de la sociedad española tienen a su disposición no encajan, se debe realizar y colocar en la escuela una educación, en la que tanto niños como adultos desarrollen conocimientos y hábitos que se enfoquen en la sostenibilidad ecológica, el reciclaje y la racionalización. uso basado en recursos naturales, ahorro de agua y energía, limpieza y cuidado de nuestro medio ambiente, etc.