Todos tenemos o hemos tenido uno Bombilla en nuestros hogares. Esta luz es muy cálida y acogedora. Fue inventado hace más de 130 años y todavía se usa hoy. Por un lado, los días se cuentan por su excesivo consumo de luz en relación a la luz que nos da. Sin embargo, hay un científico que inventó una bombilla, cuya calidad es equivalente Lámparas LED.
¿Pasarán las bombillas a la historia o surgirá una nueva revolución? Repasaremos todo en este artículo.
Adios bombilla
Este resplandor que nos dan las bombillas tradicionales sigue iluminando las estancias de muchos hogares de todo el mundo. Sin embargo, la relación entre el consumo de energía y la producción de luz no está de su lado. Tras la aparición de las lámparas LED en el mercado, estas lámparas están sufriendo cada vez más por parte de la sociedad. Y no por menos porque los LED son más eficientes energéticamente y tienen más control del impacto sobre el medio ambiente. Consumen mucho menos y tienen una vida útil mucho más larga que las convencionales y de bajo consumo.
Con la llegada de las bombillas de bajo consumo, las bombillas ya estaban siendo reemplazadas. Estas lámparas no tuvieron tanto éxito como los LED porque el tiempo de encendido era más largo y el rendimiento no cumplía con los requisitos en muchas ocasiones. Cuando enciendes una bombilla de bajo consumo, la luz que te dio era pequeña al principio y gradualmente se fue haciendo cada vez más brillante. Esto sucedió en esos casos cuando ingresa a una habitación donde estará por un corto tiempo. En solo unos minutos, esa bombilla no era tan poderosa como una lámpara incandescente.
Solo el 15% de la energía consumida por las bombillas convencionales se convierte en luz. El resto se desperdicia en forma de calor por el infrarrojo. ¿Cuántas veces te ha pasado que tocas una bombilla encendida y te quemas? O estás en el baño con la luz del espejo y notas el calor continuo que emite esta bombilla. Bueno, con la llegada de los LED y su funcionamiento a bajas temperaturas, esto ya no sucede.
Nueva idea de bombilla
Aunque los días de las bombillas tradicionales están contados, es posible que tengan un nuevo punto de venta en el mercado gracias a los investigadores del MIT. Estos científicos han descubierto una forma de cómo esta bombilla puede mejorar su eficiencia y continuar iluminando hogares en todo el mundo, tal como lo hicieron hasta ahora después de su invención.
Estas lámparas fueron fabricadas originalmente por Thomas Edison y funcionan calentando un fino alambre de tungsteno. La temperatura de este cable alcanza los 2700 grados. Este cable caliente emite radiación de cuerpo negro (es un espectro de luz que lo hace parecer cálido) y calienta el resto de la bombilla.
Por el 95% de la energía que desperdicia la bombilla en forma de calorhace que estas bombillas sean ineficaces. Debido a esto, los LED eliminan los convencionales al trabajar a una temperatura mucho más baja. Si tocas una lámpara LED que funciona, nunca te quemarás.
Los investigadores del MIT han intentado darle a esta bombilla una oportunidad más tomando varias medidas para mejorarla. La primera es que el filamento metálico calentado no pierde su energía como calor residual, sino que se disipa en forma de radiación infrarroja. La otra parte es tomar las estructuras que rodean el filamento y dejar que capturen la radiación emitida para que sea reabsorbida y reemitida como luz visible. Esto intentaría no disipar el calor, sino absorberlo nuevamente y usarlo para emitir más luz.
Así que la bombilla debería tener otra oportunidad.
Mecanismos modernos y pruebas necesarias.
La estructura que desea crear para reabsorber el calor emitido y evitar que se disipe está formada por numerosos elementos en la tierra, por lo que se puede crear fácilmente utilizando tecnología tradicional. Esto contribuiría en gran medida a reducir los costos de producción y le permitiría tener un buen éxito de ventas debido a su mayor eficiencia.
Si comparamos la eficiencia de las posibles nuevas lámparas incandescentes con las antiguas, podemos ver que estas últimas tienen una eficiencia entre el 2 y el 3%, mientras que los nuevos podrían tener hasta el 40%. Ese hecho puede suponer toda una revolución en el mundo de la iluminación.
La realidad no es tan simple como se estima teóricamente. Las pruebas realizadas en las bombillas todavía dejan algo que desear. Se alcanzan eficiencias de alrededor del 6,6%. Sin embargo, este porcentaje ya corresponde a muchas de las lámparas fluorescentes compactas actuales y se acerca al de las lámparas LED.
Reciclar la luz
Los investigadores llaman a este proceso el reciclaje de la luz porque utilizan longitudes de onda en la construcción de las nuevas bombillas que no quieren convertir en las que ayudan en la luz visible. De esta forma, la energía que se supone que se va a disipar se recicla para convertirla en energía visible.
Una de las claves más importantes para desarrollar esta nueva bombilla es esta la fabricación de un cristal fotónico que puede operar en diferentes longitudes de onda y ángulos. De esta manera, se logrará una iluminación más eficiente. Puede competir con otras fuentes tradicionales e incluso con luces LED.
Aunque los investigadores creen que las bombillas LED son muy buenas y esenciales para ahorrar luz, esta nueva tecnología puede ayudar a promover una tecnología existente que es fácil de usar y crear, aumentando así la competencia en el mercado y aumentando el potencial de los clientes.