¿Hemos escuchado alguna vez qué es el permafrost? Es una capa de tierra que está permanentemente congelada. y en algunos lugares tiene incluso 1.000 metros de espesor. Ocurre en las regiones árticas justo debajo de la superficie de la tierra. Este permafrost se formó hace millones de años cuando prevalecieron las edades de hielo.
Bueno en este momento Bajo la influencia de los seres humanos y el calentamiento global, este permafrost se está derritiendo. Se han realizado investigaciones sobre el derretimiento del permafrost y se ha concluido que esto puede llegar al punto de un cambio climático fuera de control a menos que encontremos otras formas de intervenir.
El problema del permafrost
El permafrost se está derritiendo debido al calentamiento global y, aparte de los problemas que causa a las especies que viven en él y a todos los ecosistemas relacionados, el gran problema que tiene para el planeta. es que contiene grandes cantidades de metano almacenado que podría liberarse a la atmósfera cuando finalmente se derrita por completo.
Recordamos que el gas metano es un gas natural que puede almacenar hasta 25 veces más calor que el dióxido de carbono (CO2). A medida que el hielo se derrite, el metano se libera constantemente a la atmósfera y, como gas de efecto invernadero, aumenta aún más el calentamiento global.
No podemos detener este proceso, pero podemos intentar atrapar el metano si se libera porque la industria del gas cuenta con la tecnología para hacerlo y sumarse a la lucha contra el cambio climático.
En 2014, los científicos también comenzaron a descubrir extraños cráteres en el paisaje que parecen haberse formado como resultado de explosiones. Parece que la presión aumenta en las colinas hasta que se libera una burbuja de metano gigante con fuerza explosiva. Esta liberación de gas metano tiene consecuencias globales ya que este gas almacena y amplifica los efectos del cambio climático.
¿Cuál es el problema con todo esto? Aunque la industria del gas tiene la tecnología para detener esto y capturar gas metano ya que no se puede comercializar, no están invirtiendo en ese gas.. Una posible solución sería al menos quemar el gas para convertir el metano en CO2, que almacena mucho menos calor. Esto sería más respetuoso con el medio ambiente que dejar escapar el metano. Sin embargo, todas estas actividades tendrían que ser financiadas íntegramente por los gobiernos.